Reestructuración social

De allí surgían, de un infierno negado, mentir engañar y falsear eran su mínima carta de presentación, pues de un modo hipócrita y cínico hacían que toda su demagogia pudiera ser hasta creíble engañando en todo.



Sin piedad tergiversaban, vivían por encima de sus posibilidades robando éstas a los demás mortales, que desamparados y solos, aún pagando compañía y defensa, morían de modos monstruosos defendiendo el engaño de lo que les mataba.

Arriba gandules!!!, entregad todo lo que poseáis, miserables, aunque no tengáis gran cosa, solamente se os pide vuestra inútil vida y la de vuestra descendencia, para que sea la continuación de vuestro desesperante futuro en el que, ¿sobran las personas?, las matamos.

Seguían llamándose humanos después de sus innumerables y deshonrosos asesinatos. Abominaciones aberrantes eran, sin rastro de empatía decidían sobre la vida de los demás cruelmente, puesto que la economía les nombró dioses y algunos, como buenas execraciones terminaron creyendo que lo eran.

Inhumanos que podían borrar del mapa y sufriendo a cualquier persona o a millones, justificando su salvaje inmoralidad en el futuro de la humanidad, que eran los que asesinaban sin piedad y con engaños por los beneficios.

Y matando miles de personas de horribles modos obtenían su poder, fácilmente eran considerados héroes aquellos asesinos de masas que redujeron a polvo a los hijos legítimos de la humanidad, generación tras generación.

Su cambio social, había convertido a las personas en mercancía, siempre prescindibles y cuantificables en un mundo de números patológicos que señalan vuestra decadencia.

Nunca entendisteis lo que significa ser humano porque sois monstruosos, una copia fallida que al darse cuenta de que nunca sería persona, cargó contra la humanidad para justificar su atrocidad.

El concepto define por muy desalmado y despiadado que se sea, que nunca mataréis a la humanidad, porque la humanidad es todo, eso significa que está en todas partes, no solamente aquí y ahora.